TANTRA, LA CIENCIA ETERNA
Tantra, literalmente significa “aquello que libera de la oscuridad”. Sus prácticas espirituales centradas alrededor de la meditación se esfuerzan por despojar la niebla del egocentrismo y de la estrechez mental que envuelve y anula las potencialidades infinitas de la mente humana.
Las irresistibles características del Tantra son su perspectiva profundamente positiva del universo y su comprensiva aceptación del mundo fenomenal, como una expresión de la Conciencia infinita y esencial.
Al tener la perspectiva de que toda existencia surge de una misma Conciencia infinita, el principio del Tantra es que cada individuo, al penetrar el núcleo de su propia conciencia, puede experimentar la unidad de todas las cosas y trascender la percepción sensorial con su perspectiva divisoria del mundo relativo. La meta máxima del Tantra consiste en la unión con la Conciencia absoluta; un estado más allá del inhibidor ego y su fragmentación de la realidad.
La liberación de la Conciencia
Vivimos en un mundo de cambios asombrosos, un mundo que da grandes pasos hacia adelante en cuanto a entendimiento y conocimiento de lo mundano. Se le ha dado a la sociedad post-industrial el nombre de la era de la informática. El avance científico, especialmente la computación y los nuevos medios de comunicación, pone a nuestra disposición una enorme cantidad de información.
Pero mientras nuestras mentes quedan pasmadas ante la nueva y dorada era de la ciencia, y las empresas se apresuran en la carrera feroz por dominar los mercados que están en rápida expansión, la sociedad global languidece por falta de comprensión espiritual de la naturaleza humana. En medio de la actividad frenética, se aniquilan la armonía interna y la comprensión bajo el peso de un sistema nervioso sobrecargado.
A medida que la sociedad global se hace cada vez más una sociedad urbana, el stress y las tensiones crecen exponencialmente. La gente se encuentra atacada en todos los niveles: emocional, física y socialmente. La vida urbana, el punto focal de la sociedad post-industrial, presenta nuevos dilemas complejos.
Se han forjado toda una serie de presiones psicológicas y ambientales cuyo resultado ha sido una mayor desintegración de la personalidad que quizá nunca antes se había visto en la historia humana. La experiencia de este stress en un nivel masivo, ha subrayado la necesidad de un medio para lograr una cohesión interna. En la psicología, investigadores y practicantes han comenzado a comprobar la eficacia de las técnicas de expansión mental de la meditación, para reintegrar la personalidad. Sin embargo, como veremos en los capítulos siguientes, la meditación tántrica y sus prácticas complementarias son mucho más que un proceso para solucionar las motivaciones del stress; están destinadas a elevar al individuo a un estado de conciencia liberada.
¿Porqué meditar?
Muchas terapias se basan en el principio de que si se localiza y reconoce la fuente de una tensión mental particular, entonces se le puede comprender y hacer frente; o que experimentando de nuevo la situación en la cual se formó una tensión particular, la raíz de la tensión puede ser expresada y, en consecuencia, eliminada.
El tipo y extensión del condicionamiento reconocido depende de la escuela de pensamiento. Por ejemplo, muchas escuelas creen que al momento de nacer, el individuo es una “placa vacía” sobre la cual se forman todos los gustos, disgustos y creencias. Otras remontan el origen del condicionamiento y la creación de tensiones hasta el útero y las experiencias prenatales.
El concepto de condicionamiento y su impacto psicológico es importante también en el Tantra y ayuda a comprender la meditación. Pero mientras la idea del Tantra respecto al condicionamiento es parecida en muchas maneras a la psicología moderna, su comprensión del alcance y de la influencia limitante del condicionamiento, es considerable.
El Tantra expande los parámetros del condicionamiento para abarcar la individualidad entera de una persona. Todas las impresiones sensoriales y pensamientos, iniciados o experimentados por el individuo, se combinan para formar la identidad de su ego.
Entonces, en un estado puro incondicional, la mente cambia completamente el ego restrictivo y lo sustituye por la identidad de la Conciencia Universal: La individualidad se transforma en un sentimiento de unidad con todas las cosas.
Este despojarse de condicionamientos de la mente es facilitado por la meditación. Al identificar la mente con la Conciencia esencial, más allá de la visión preconcebida del ego, éste se reduce poco a poco, revelando una identidad más significativa y una visión del mundo que es clara, fresca y sin prejuicios.
Más allá de la conciencia diaria
(Para la mayoría) Generalmente la realidad que se percibe con la ayuda de los cinco sentidos, es la única, o por lo menos se la trata como tal. Así como la persona que vive en una localidad particular toda su vida y cree que ese es el único lugar del mundo, así igual creemos que nuestra limitada percepción de las cosas es completa.
La ciencia ha mostrado hasta qué punto son limitados nuestros sentidos. Solamente una pequeña porción del inmenso espectro de ondas luminosas que penetran la existencia diaria son percibidas por nuestros ojos, y, similarmente, tan solo una fracción de las ondas sonoras son captadas por nuestros oídos. En total observamos solo una pequeña parte de la realidad que la ciencia afirma conocer.
Aún más sorprendente resulta el hecho de que al analizar a nivel subatómico lo que podemos percibir, encontramos que esta realidad no existe en los mismos términos en que la observamos. Lo que vemos como materia sólida, en un nivel subatómico corresponde a numerosas partículas que se mueven a grandes velocidades en enormes áreas de espacio vacío. El hecho que incrementa aún más este dilema consiste en que actualmente los científicos no pueden determinar si estas “partículas” tienen alguna “sustancia” real. Entonces, lo que antes creíamos ser tangible y definido, es desconocido en otros niveles de medida y hace un absurdo de nuestra comprensión y percepción.
Las innumerables longitudes de onda percibidas por la ciencia con instrumentos muy sutiles, no existían para las personas hace más de un siglo. La ciencia ha descubierto ahora estas ondas y ha aprendido a utilizar este nuevo conocimiento.
Se puede especular sobre lo que la ciencia podría encontrar en el futuro, pero hace milenios el Tantra ha reconocido la miríada de formas vibratorias que existen a través del universo, y ha descrito el proceso de creación en términos de longitudes de onda.
Hasta ahora, la ciencia ha descrito únicamente la materia y la energía física en términos de longitud de onda. El Tantra también explica la mente y la energía psíquica en términos de formas vibratorias u ondulares. Lo que percibimos con nuestros sentidos y que la ciencia capta con la ayuda de instrumentos es, según el Tantra, únicamente un nivel de realidad relativa; el más burdo. Por encima de la realidad física se encuentran varios niveles mentales que no pueden ser explorados con el uso de instrumentos físicos ni con los sentidos; deben ser comprendidos con el uso de un instrumento más sutil: la mente.
La meditación es un medio para resintonizar la mente, retirarla de la apreciación puramente sensorial del mundo. Entonces podremos apreciar las esferas más sutiles de la existencia y reconocer la belleza profunda del mundo en que vivimos.
No hay una razón única
Como la meditación está tan profundamente arraigada a la búsqueda de la esencia de la vida humana, no existe una explicación simple de lo que ella es, ni una razón única del por qué las personas comienzan su práctica. Cualquiera que sea la razón verdadera, la meditación no está limitada por una motivación inicial.
A medida que los horizontes de la mente se expanden a través de la meditación, la Conciencia es descubierta y se disuelven las razones iniciales con la expansión evolutiva del sentido del ser espiritual. Al final encontramos que lo que creíamos razones personales para meditar, en realidad eran reflexiones del deseo de nuestra naturaleza espiritual por expresarse.
“La espiritualidad no es un ideal utópico, sino una filosofía práctica, que puede ser practicada y realizada en la vida cotidiana.Espiritualidad significa evolució elevación, no superstición o pesimismo” Shrii Shrii´nandamu´rti
Jinana Yoga, literalmente, el “Yoga del Conocimiento”, enfatiza en el estudio y en un enfoque filosófico para aumentar la conciencia intelectual, al punto de lograr la realización del Absoluto.
Karma Yoga, o el “Yoga de la Acción”, es el arte de realizar acciones orientadas al servicio, mientras la mente cede el sentido de hacedor, de vanidad y de retribución a la Conciencia Cósmica, que es vista residiendo en todo y en todos.
Bhakti Yoga, el “Yoga de la Devoción”, busca cultivar la fuerza atrayente del amor puro por la Conciencia Cósmica. Atrae al aspirante lo más cerca posible hacia el amado, para así lograr la realización.
Hatha Yoga, es un enfoque que abarca varias disciplinas para el cuerpo, incluyendo posturas de Yoga, ejercicios respiratorios y técnicas de purificación. Este control y regulación de las funciones físicas ayuda a lograr el dominio sobre la mente para alcanzar la meta.
Raja Yoga, conocida también como As´t´aunga Yoga, significa el “Yoga de los Ocho Pasos”: ética, posturas de Yoga, control de la fuerza vital a través de la respiración, concentración, meditación y absorción en la Meta. Aunque todos los aspectos del Raja Yoga han sido practicados por los yoguis por millares de años desde la época de Shiva, fueron codificados sistemáticamente en los “Aforismos del Yoga” por Patanjali, hace aproximadamente 2.900 años.
La división del Tantra en áreas diferentes y especializadas le llevó a su declinación como un camino efectivo y completo de la vida. Las diferentes escuelas al concentrarse en áreas particulares, descuidaron la sabiduría global del Tantra.