¿Realmente soy un pecador?

¿Realmente soy un pecador?   

Por Parabhakti

Hemos hablado en el número anterior de Vistára acerca del dogma religioso, así como también de algunas de sus repercusiones en la mente humana, poniendo especial énfasis en aquellos dogmas que bloquean el progreso psico-espiritual de la sociedad, tales como la creencia de una “única religión verdadera”, o la existencia del paraíso o el infierno.

En este cuarto ejemplar de Vistára ahondaremos en el dogma religioso del pecado.

pecado 1

Si nos remontamos un poco en la historia, encontramos que la palabra “pecado” ha sido utilizada desde hace cientos de años. Por ejemplo, los antiguos griegos empleaban la palabra hamartia que quiere decir: “fallo de la meta”, “no dar en el blanco”. Para los hebreos la palabra usada para referirse a pecado es jattá’th, que igualmente significa “errar”, aludiendo a no alcanzar una meta o un objetivo específico.

“El concepto religioso aún vigente de pecado como ‘delito moral’ alude a la transgresión voluntaria o involuntaria de normas o preceptos religiosos” 1 . Y puesto que existen diversas normas religiosas, el número de pecados se hace innumerable también, los cuales pueden ser de mayor o menor grado –y a los cuales se les asigna un castigo correspondiente− dependiendo de las distintas creencias.

Sin embargo, no todas las religiones manejan el concepto de pecado; las principales como la cristiana, la judía y la musulmana han adoptado este término para referirse –en el caso de la tradición judeocristiana− al alejamiento del hombre de la voluntad divina. Según el cristianismo, los seres humanos han heredado una naturaleza pecaminosa (de la primera pareja humana, Adán y Eva), la cual afecta todos sus actos y pensamientos, y que sólo puede ser superada mediante el esfuerzo de seguir la Ley de Dios y la fe en Jesucristo.

pecado 2

Los dogmas de este tipo provocan en la mente humana complejos de miedo, inseguridad e inferioridad. De esta manera, muchos líderes religiosos aprovechan tal discurso –el del pecado− para mantener sometidos a sus seguidores, con lo cual se detiene el progreso psico-espiritual de la humanidad en general.

pecado 3

Actualmente, la palabra “progreso” es sólo entendida en función de los bienes acumulados o los conocimientos y desarrollo intelectual adquiridos; sin embargo, el verdadero progreso solamente se puede dar en el estrato espiritual. 2

Cuando la gente está influenciada por este tipo de dogmas religiosos, simplemente no puede lograr tal progreso, y de igual forma afectan el progreso de otros. Muchas veces ni siquiera se razona por qué se siguen ciertas enseñanzas, simplemente se da por hecho el tener que respetarlas y obedecerlas estrictamente, ya sea porque los antepasados así lo hicieron, o por el miedo de nunca alcanzar el perdón de Dios. Si desde que somos pequeños se nos inculca que hemos nacido bajo pecado, seguramente nuestra actitud siempre será de miedo hacia Dios, nos enfocaremos tanto en este aspecto que el miedo nos volverá estáticos, y cuando hay estaticidad no puede haber ningún tipo de progreso.

Cuando una persona se repite a sí mismo que es un pecador, efectivamente se vuelve uno, pues en lo que constantemente pensamos nos convertimos. La relación con Dios no debería estar basada en el miedo, sino todo lo contrario, debemos enfocarnos en el amor y la devoción hacia Él. Un padre no puede odiar a sus hijos, aun cuando estos le desobedezcan; igualmente, nuestro Padre Supremo no puede odiar a ninguna persona, pues todos somos su creación. 3

pecado 4

El Señor Shiva dijo que ningún hombre debería albergar ningún tipo de complejos, un aspirante espiritual debería estar libre de todo complejo, no se debe desarrollar complejo de superioridad, ni de inferioridad o miedo, su mente debe estar completamente equilibrada. 4

En ocasiones cometemos errores (que algunos podrían llamar pecados), pero tanto la virtud como el vicio son entidades temporales, para el Padre Supremo todos somos sus hijos y Él no considera a nadie pecaminoso. Supongamos que un grupo de niños juega en la calle, uno de ellos cae y se ensucia la ropa y el cuerpo. Las personas que crucen por allí se reirán, pero cuando el padre vea a su hijo en tales condiciones ¿qué hará?, ¿se reirá de su hijo? Claro que no, el padre lo llevará consigo, lo sentará en sus piernas, lo limpiará y luego le dirá que sea más cuidadoso. Asimismo, nuestro Padre Supremo nos sienta en su regazo a pesar de que en ocasiones nos equivoquemos, para él ninguno de sus hijos puede ser considerado un pecador.

pecado 5

 “…en el pasado, tú fuiste un pecador, olvídalo. Recuerda que desde este preciso momento, tú eres el hijo ordenado y limpio, tú eres el niño ordenado y limpio del Padre Supremo. Entonces no deberías tener ninguna psicología o complejo de pecador. Para un aspirante espiritual, no debe haber ningún complejo. Se libre de todo complejo, y muévete a lo largo del camino de la justicia con una mente balanceada, con una mente equilibrada… un futuro brillante te espera.” 5

 

Bibliografía:

  1. Wikipedia.
  2. “The three causes of sin”. Shrii Shrii Anandamurti.
  3. “Superstition, sin and dogma”. Shrii Shrii Anandamurti.
  4. “Be free from all complex…”. Shrii Shrii Anandamurti.
  5. “Be free from all complex…”. Shrii Shrii Anandamurti.